10 de noviembre de 2008

CUANDO ES PRIMAVERA EN OTOÑO

me acerqué a la terraza en busca de silencio
pero los grillos cantan alegres
caen gotas de lluvia sobre mis hombros desnudos
el humo del cigarrillo no alcanza a calmar la angustia
zozobra que invadió mis huesos esta noche

ese coche estacionado de por vida en el patio de mi casa
sería el refugio perfecto
le temo a esta soledad
la que abandoné el día que escuché tu voz,
una tarde de junio cuando pronunciaste
por primera vez mi nombre
con sus cinco letras sonoras,
cuando un beso tuyo convertido en palabras
me envolvió entre tus piernas sin darme cuenta

me acerqué a la terraza para hablar con los pinos
y buscar en el cielo estrellado la certeza
que tus labios volverán a los míos y tus manos
correrán urgidas sobre mis muslos
cuando en una noche como ésta
nos amemos para siempre

me acerqué a la terraza, ilusa,
para hablar con el aire
que respira desconsuelo
para pedirle respuestas calma empatía

1 comentario:

Gonzalo Del Rosario dijo...

"una tarde de junio cuando pronunciaste
por primera vez mi nombre
con sus cinco letras sonoras"

Estos versos me gustaron mucho